Hablemos de B12: qué es, para qué sirve, su origen, cómo podemos obtenerla en una alimentación basada en plantas y cómo pedir para ver tus valores en sangre.
¿Qué es la Vitamina B12 y para qué sirve?
La vitamina B12, también conocida como cianocobalamina, es una vitamina hidrosoluble esencial para el funcionamiento del organismo.
Desempeña un papel crucial en la formación de glóbulos rojos, el funcionamiento del sistema nervioso central y el metabolismo de glúcidos, lípidos y proteínas.
Origen de la Vitamina B12 y su disponibilidad en alimentos
La vitamina B12 se produce por bacterias (Propionibacterium, Bacillus, Pseudomonas, y Streptomyces) y se encuentra en el suelo.
Los animales la consumen al pastorear, pero en la actualidad, la mayoría del ganado es suplementado con B12 en su alimentación debido a la disminución de estas bacterias en el suelo por prácticas agrícolas modernas. Esta vitamina solo se puede obtener a partir de la ingesta de alimentos de origen animal, ya que el cuerpo humano es incapaz de sintetizarla.
Alimentos como la carne, el pescado, los huevos y los productos lácteos son fuentes ricas en vitamina B12. Y aunque se conoce que la levadura de cerveza y algunas algas, como la espirulina, contienen B12, esta no se encuentra en una forma bioquímicamente activa para cumplir funciones en el organismo.
Cómo identificar y prevenir la deficiencia de Vitamina B12
La deficiencia de vitamina B12 puede llevar a una variedad de problemas de salud, incluyendo anemia megaloblástica, fatiga, debilidad, problemas neurológicos y deterioro cognitivo.
Las personas con mayor riesgo de deficiencia son aquellas que siguen dietas veganas o vegetarianas, así como aquellas que consumen carne de forma ocasional. La absorción de B12 también puede verse comprometida en personas mayores o en aquellas con trastornos gastrointestinales.
Suplementación de B12: Dosis adecuadas
Deben suplementarse sí o sí las personas que llevan una alimentación vegana, vegetariana o aquellas que incluyen carne en su alimentación pero de forma ocasional.
La dosis de suplementación se evalúa de forma individual luego de analizar los resultados de vitamina B12 y homocisteína en sangre. En general, la suplementación puede variar, pero una dosis comúnmente recomendada es de 2000 microgramos a la semana, dependiendo de las necesidades individuales y los niveles séricos de la vitamina.
Es fundamental que cualquier persona que sospeche tener deficiencia de vitamina B12 consulte con un profesional de la salud para recibir un diagnóstico y un plan de tratamiento adecuado.